Biblioteca popular Andrade Concordia. La Biblioteca Olegario Víctor Andrade vivió este fin de semana un hecho histórico, al concretar, luego de mucho tiempo, la primera suelta de libros de la actual comisión, que está encabezada por el escritor y poeta Juan Meneguin, jornada que superó todas las expectativas de la comisión directiva y que, pese a las inclemencias del tiempo, convocó a una gran cantidad de público.
“Nos superó completamente la concurrencia. Fue un día espantoso, llovía desde la mañana y aun así la gente seguía llegando. Lo más lindo es que se sumaron muchas familias y contamos con cerca de 30 nuevos asociados”, expresó el poeta y escritor Juan Meneguin, actual director de la institución, en diálogo con Diario Río Uruguay.
Durante la actividad, los asistentes pudieron llevarse ejemplares de los llamados “expurgados”, es decir, material de lectura que se retira del acervo activo pero que sigue teniendo valor para la circulación. “Es una manera de darle nueva vida a los libros, de hacerlos circular”, explicó Meneguin, destacando además la alegría de ver a chicos y chicas recorrer la biblioteca en busca de lecturas.
Resurgimiento
La respuesta del público no solo quedó en la jornada. En los últimos meses, la biblioteca experimentó un verdadero resurgimiento: pasó de apenas 84 socios en abril —de los cuales menos de 20 estaban activos— a casi 380 en la actualidad.
“Asumimos el 6 de mayo y en cuatro meses triplicamos y más la cantidad de socios. Eso muestra que hay una esperanza cierta a futuro, porque la biblioteca volvió a ser un lugar al que la comunidad se acerca”, señaló su director.
Actualmente, la institución funciona de lunes a viernes en horarios reducidos, aunque la comisión proyecta extenderlos. “Hoy no podemos abonar más horas, pero la idea es llegar a abrir todo el día cuando estén dadas las condiciones”, adelantó Meneguin.
Situación edilicia
La biblioteca también enfrenta serias dificultades edilicias, consecuencia de los años de cierre. “Necesitamos arreglos de todo tipo, desde lo más simple como cambiar un cuerito de canilla, hasta obras millonarias. No tenemos desagüe, y la cloaca del piso superior está cortada: si se tira la cadena arriba, se mojan los libros de abajo. Esa es la crudeza de la situación”, describió.
De cara al futuro, la comisión ya proyecta una nueva suelta de libros para el mes de diciembre. “La suelta es necesaria, oxigena a la biblioteca. No se trata de deshacerse de libros, sino de hacer circular el conocimiento. Alguien dona, otro lo aprovecha, y todo vuelve a girar”, concluyó Meneguin.
"El espacio se ocupa gratuitamente, es una biblioteca popular. Es decir, está abierta al pueblo. Está en el viejo sistema de bibliotecas populares, no es una biblioteca privada. Esto no es una asociación privada y venir a usar la interacción en los libros, cualquiera lo puede hacer" indico.