El pasado lunes 20 de septiembre comenzó el juicio penal contra Guillermo Pietrantrueno, a cinco años del accidente que sufrió Bruno Escobar en el boliche Costa Cruz que le provocó una grave lesión, dejándolo en estado cuadripléjico.
El debate es contra quien quedó como único responsable del local nocturno y que se encuentra acusado por el delito de “lesiones culposas gravísimas”, que de acuerdo a lo que tipifica el artículo 94 del Código Penal Argentino, es un delito que puede ser penado con hasta 3 años de prisión.
Este jueves 23 de septiembre, “se clausuró la etapa de la producción de pruebas”, es decir "testimoniales y la parte técnica de los funcionarios que intervinieron en el bosquejo, planificación de los planos y la parte policial de criminalística”, explicó el abogado defensor del imputado, Carlos Medina, a un cronista de Diario Río Uruguay.
Consultado sobre la situación de su defendido, Medina remarcó que “no hay elementos de pruebas cargosos, por las testimoniales y por la producción de prueba”. Subrayando que “esperemos llegar a una absolución porque a criterio de la defensa, no hay elementos de cargo contra mi defendido, sobre todo después de haberse producido toda la prueba”.
