Atrincherado con un revolver. El hecho se inició alrededor de las 20 horas del jueves 17 de octubre, en la ciudad de Colón, donde se tomó conocimiento de que un hombre de unos 40 años se había encerrado en su vivienda, armado con un revólver, y amenazando con efectuar disparos contra cualquier persona que intentara ingresar, según se precisó a Diario Río Uruguay.

Ante la gravedad de la situación, desde esa ciudad se solicitó la colaboración del grupo de élite de la Jefatura Departamental Concordia, que se trasladó de inmediato hacia la ciudad de Colón. Los efectivos especializados fueron puestos al tanto de los pormenores del caso y comenzaron a planificar la estrategia de ingreso, procurando preservar la integridad tanto del atrincherado como de los vecinos y del personal policial.

Durante más de ocho horas, la zona permaneció acordonada, mientras los negociadores intentaban lograr que el hombre depusiera su actitud. Sin embargo, ante la falta de respuesta positiva, se dispuso el ingreso táctico al domicilio en las primeras horas de la madrugada.

Ingreso sin heridos

Según informaron fuentes policiales, al iniciar el procedimiento se constató que la puerta de la habitación donde se encontraba el sujeto era de madera y estaba cerrada. Mediante el uso de una herramienta especial —un ariete— se logró forzar la entrada.

En ese momento, los agentes visualizaron al hombre, que permanecía de pie junto a la cama, empuñando un arma de fuego tipo revólver en su mano derecha.

Gracias al rápido y preciso accionar de los operadores del grupo de élite, el individuo fue reducido antes de que pudiera efectuar ningún disparo. Inmediatamente fue desarmado y esposado, garantizando la seguridad de todos los presentes. Posteriormente, fue trasladado hacia el sector del living-comedor y entregado a las autoridades locales, que continuaron con las diligencias judiciales de rigor.

Intervención conjunta

El operativo, que demandó varias horas de trabajo coordinado entre la Policía de Colón y la de Concordia, finalizó sin personas lesionadas.

Desde la fuerza se destacó el profesionalismo del personal interviniente y la colaboración entre las distintas dependencias policiales para resolver una situación de alto riesgo sin consecuencias lamentables.

El hombre quedó a disposición de la justicia, mientras que el arma de fuego fue secuestrada como parte de las actuaciones iniciadas.